Óscar Perfer

Ha sido retratista por vocación desde su infancia en su pueblo natal, Chiquinquirá, Colombia, donde acompañaba a su padre Israel en los trabajos que realizaba en la Editorial Veritas de los curas dominicos, ahí tuvo su primer contacto con el arte pictórico religioso. Al mismo tiempo, observaba cómo su padrino, el fotógrafo Justo Céspedes, realizaba retratos con su característica luz continua y posteriormente los retocaba a mano con la antigua técnica del lápiz.

Antes de dedicarse a la fotografía por completo, Perfer trabajó como director creativo en su estudio de diseño, logrando un importante reconocimiento en el área editorial, que lo llevó a recibir diversos galardones a nivel nacional e internacional. A partir de 2008 enfocó toda su experiencia en el arte de la fotografía. Esta pasión y talento lo llevaron a desarrollar diferentes proyectos en Sudamérica, Europa y Norteamérica.

Es un artista inquieto, de mirada sensible, influenciado por los pinceles clásicos holandeses, especialmente las obras de Rembrandt, Vermeer y Jan Lievens, con una pasión por los rostros y todo aquello que invoque el onírico claroscuro. Desde 2014 ha desarrollado su sello personal, donde la luz pictórica es la característica que expresa a través de sus hipnotizantes retratos. Su obra artística más conocida es su serie denominada Fijamente, entre lo sacro y lo profano, la cual ha sido expuesta en múltiples lugares, siendo un referente en la fotografía colombiana de retratos.

En la actualidad, Perfer continúa desarrollando su trabajo en la búsqueda de esos rostros anónimos que todos sabemos que existen, que están ahí y a través de su lente capta esa esencia que va más allá de lo físico.