Elena Durán

Nació en Oakland, CA, es hija de madre y padre mexicanos. Una de sus influencias más formativas fue su abuela originaria de Aguascalientes, Soledad Muñoz, quien la llevaba a ver películas mexicanas todos los viernes por la noche en el Star Cinema de Oakland. Fue ella quien introdujo por primera vez a la joven Elena a la música y las películas hechas en México e inspiró el amor por sus raíces.  

Estudió en Mills College, pero después de un año dejó esta institución porque le ofrecieron el puesto de profesora de Flauta en la Universidad de Stanford. Después de dos años, por consejo de Jean Pierre Rampal, se ausentó y se presentó a una audición para la clase de Aurele Nicolet en la Hochschule für Musik de Friburgo. Fue una de las dos únicas estudiantes aceptadas de una convocatoria de cien aspirantes. Durante tres años Nicolet y Andre Jaunet fueron sus maestros. Después viajó a Berlín para estudiar con James Galway, flautista principal de la Filarmónica de Berlín. 

Su siguiente reto la llevó a Londres, donde pasó dos años como asistente de James Galway, editando su música y escribiendo su libro sobre la flauta. Después de esto, comenzó su carrera como flautista solista. A lo largo de los años, ha ocupado varios puestos docentes, pero su enfoque principal ha sido tocar la flauta en recitales y con orquesta como solista. 

En varias ocasiones tocó la reina Isabel II del Reino Unido y para todos los miembros de la Familia Real Británica y para varios presidentes. Se ha presentado como solista con más de cincuenta orquestas en quince países diferentes y ha dado recitales por todo el mundo. Ha grabado una amplia variedad de música, desde Bach, Delius y Moncayo hasta la música de los Beatles y Claude Bolling, incluidos dos álbumes de jazz con el gran Stephane Grappelli y una grabación ‘superventas’ con Paul McCartney. 

Durán fue Embajadora de Turismo y Cultura de la Ciudad de México. Ha recibido varios premios humanitarios por su trabajo en la frontera entre Estados Unidos y México. Con su programa personal de divulgación Flauta sin fronteras ha llevado la música a miles de personas que normalmente no podrían asistir a los conciertos, con especial interés en las personas privadas de su libertad.