La casa, que originalmente era una torre de noria que abastecía la Hacienda de Guadalupe en el siglo XVIII, fue clausurada durante la Guerra de Independencia. Situada junto al arroyo Pastita, la torre captaba agua para la molienda de plata. En 1966, los artistas Olga Costa y José Chávez Morado adquirieron el lugar, restauraron la torre y añadieron habitaciones y un gran jardín, convirtiéndolo en su hogar y estudio por más de treinta años. Posteriormente, donaron la casa y sus colecciones al Gobierno de Guanajuato, inaugurándose el museo en 1993. En la planta baja se exhibe una colección permanente de muebles y objetos de cerámica, vidrio, retablos y máscaras. El museo alberga más de 70 obras de Costa y Chávez Morado, además de piezas de importantes artistas nacionales e internacionales.