Es el año 1700, en Veracruz, una joven mulata acusada de brujería se encuentra en una celda esperando su condena. Durante su reclusión es víctima de distintas vejaciones y maltratos por el gobernador del lugar. Cierto día el viento resopla con fuerza dentro de la celda y trae consigo a las ancestras de Soledad, quienes la reconfortarán y darán fuerza para enfrentar a sus acusadores y recuperar su libertad.