El innovador primer largometraje de Sally Potter es una película clave del cine feminista de principios de los 80. Buscadores de oro es una llamativa provocación cinematográfica, protagonizada por Julie Christie y filmada en blanco y negro por Babette Mangold (la directora de fotografía de Chantal Akerman). Realizada con un equipo exclusivamente femenino, adopta una estructura narrativa radical y experimental. Celeste (Colette Laffont) es una empleada de informática en un banco que se fascina por la relación entre el oro y el poder; Ruby (Christie) es una enigmática estrella de cine en busca de su infancia, sus recuerdos y la verdad sobre su propia identidad.