De lo clásico a lo contemporáneo, así se vivió la penúltima noche cervantina en el FIC 50
- Dudamel fue ovacionado por el público después de una participación magistral.
- Paté de Fuá prendió la Alhóndiga con temas propios y hasta canciones populares mexicanas
Guanajuato, México. 29 de octubre de 2022.- Este sábado 29 de octubre contó con la participación musical de Selma Uamusse, Coro Acardenchado, Tomoko Mukaiyama, Paté de Fuá. Gustavo Dudamel y la Filarmónica de Los Ángeles y Hello Seahorse!, mientras que lo visual se nutrió con la danza contemporánea de Physical Momentum.
La jornada del último sábado cervantino comenzó con la presentación de Selma Uamusse, quien entre mensajes de amor, paz y alegría mostró un poco de la música de Mozambique, su país de origen, acompañada de ritmo y fiesta.
Este concierto contó con intervenciones en las cuales la artista habló en español, mencionando desde el origen de su proyecto musical y presentando algunos instrumentos originarios de Mozambique con los que crea música.
Por otro lado, algunas piezas fueron interpretadas entre el público y al respecto la cantante mencionó “Hago esto en todos mis conciertos, porque nosotros no somos estrellas, somos personas y tenemos problemas como todos”. Creando así un ambiente de familiaridad y unidad, todo con el mismo mensaje de paz entre naciones y la esencia de compartir la cultura, parte esencial del Festival Internacional Cervantino.
Entre las canciones interpretadas se encontraron Hope, Mama, No guns, Mati, Song of Africa y hasta un cover de Funkier Than a Mosquito´s Tweeter de Nina Simone, con quien mencionó se siente identificada, porque estudiaron cierto tipo de música, se graduaron y nunca existió el miedo a rockear, haciendo una clara referencia al concierto de esta tarde.
El Coro Acardenchado llenó con sus voces cada rincón del Templo del Señor Santiago Apóstol en Marfil. El coro se ganó los corazones del público al complementar las melodías con coreografías que contaron historias de amor por la tierra natal, resiliencia, cantos tristes, pero hermosos, como Ya se van las golondrinas y Yo ya me voy amigos míos.
Las canciones, completamente a capella fueron, a veces, acompañadas con ritmos creados con las manos y pies de la misma agrupación y algunos objetos inusuales, como trozos de manguera para crear sonidos con el viento; y en un momento de la presentación la agrupación comenzó a jugar con varios sonidos imitando a la naturaleza.
Fue así como el coro demostró el compromiso que tienen con las comunidades mineras de Durango, pueblo de donde nace este género del cardenche, manteniendo su legado y compartiéndolo con espectadores de México y de todo el mundo, ahora, dentro del FIC.
Por otra parte, la pinacoteca del Templo de la Compañía de Jesús oratorio de San Felipe Neri contó con el recital de piano de la japonesa Tomoko Mikaiyama, quien interpretó la pieza Canto Ostinato de Simeon ten Holt.
Este concierto contó con una atmósfera íntima que ayudó al público a apreciar de forma cercana a la pianista, quien desde el inicio se sentó para no parar hasta el último segundo de este.
La pieza cuenta con altibajos sonoros y melódicos que ayudan a sobrellevar el concierto sin pausa, desde momentos veloces, un poco agresivos que se transforman en tranquilos y más agradables a primera escucha.
Por último, la pianista a través de la naturalidad de la composición culminó de golpe, causando un poco de controversia y silencio por unos segundos, seguido de cerca de cinco minutos de aplausos y agradecimiento personal por el público hacia la artista.
Por su parte, el penúltimo concierto en la Explanada de la Alhóndiga de Granaditas fue cortesía de la agrupación Paté de Fuá, banda que puso a todos a cantar, bailar y gritar a un ritmo fusión único.
Las interpretaciones también envolvieron a la Alhóndiga en un ambiente musical familiar, el cual disfrutaron chicos y grandes desde las gradas hasta los pies del escenario.
Entre los temas interpretados se encontraron clásicos de la banda como Película Muda, Fantasma enamorado y Vamos a morir, sin embargo, también se contó con una muestra de canciones populares mexicanas bajo su propio estilo, tales como Cien años… Pensando en ti de Pedro Infante, Adoro de Armando Manzanero, Háblame de ti de la banda MS y un clásico guanajuatense Camino de Guanajuato de José Alfredo Jiménez.
Quienes asistieron al Auditorio del Estado experimentaron una obra inspiradora, Ten cuidado con lo que deseas, que hizo reflexionar al público sobre sus sueños y la manera de ver la vida que cada uno tiene y cómo puede afectar en nuestra vida ya sea positiva o negativamente.
Los movimientos en escena son enérgicos, fuertes e impactantes; la música y la escenografía van acorde a la esencia de lo que pretenden mostrar en escena, esa sensación de frustración y desesperación por tratar de salir del infierno que plantean, un infierno que es en el que no está lejos de esta realidad. Al rotar la escenografía que, si bien es la misma, muestran distintas facetas de lo que buscan transmitir; lo mismo pasa con los cambios de ritmos e intensidad de la música. Finalmente dejaron al público ese pensamiento, desear algo tiene consecuencias.
Con el estreno en México de Altar de cuerda. Concierto para violín y orquesta, la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles (LA Phil) y María Dueñas aperturaron la noche en el Teatro Juárez con un repertorio que capturó la atención del público desde el primer momento.
La violinista española interpretó una obra de la compositora mexicana Gabriela Ortíz, en la que se pusieron a prueba la destreza, técnica y emocionalidad de la joven artista durante tres movimientos: Morisco chilango, Canto abierto y Maya déco. La suavidad tonal duradera y los crescendos inesperados generaron tensiones y escapes de energía entre los espectadores, para transitar por distintos ambientes musicales.
Al término de un pequeño intermedio la agrupación estadounidense, bajo la dirección de Gustavo Dudamel, continúo con la interpretación de la Sinfonía núm. 1 de Mahler, en la que se reflejan los sentimientos, historias de amor y pasiones del compositor austriaco.
A través de los cuatro movimientos que la conforman, los asistentes experimentaron una noche con valles de sonido estrepitosos y crestas empinadas, que estimularon la emoción entre cada subida y bajada tonal.
Al término de la noche los asistentes ovacionaron durante casi diez minutos a la LA Phil, Gustavo Dudamel y María Dueñas agradecidos por la entrega de los músicos en cada una de las piezas interpretadas.
La última velada cervantina en El Trasnoche contó con el concierto de Hello Seahorse!, banda que desde la conferencia de prensa del día adelantó una noche eléctrica bajo su estilo que cumplió sin problema.
Desde el primer momento las luces del escenario y el indie rock de Hello Seahorse! crearon una atmósfera que provocó el goce de un concierto completamente de pie por parte del público cervantino.
Este año, la banda celebró 10 años de su álbum Arumina, por lo que parte de su repertorio se basó en este material con canciones como No es que no te quiera, El artista y Para mí.
Sin embargo, también contó con temas clásicos como Año quebrado y Bestia, temas que recordaron los primeros años de la banda entre todos los presentes, quienes nunca pararon de bailar y brincar como en un clásico concierto de rock
La programación completa de la edición 50 del Festival Internacional Cervantino se puede consultar en festivalcervantino.gob.mx y en la aplicación oficial del festival. Visita las redes sociales del festival en Twitter (@cervantino), Facebook (/Cervantino) e Instagram (@cervantino). Sigue las redes sociales de la Secretaría de Cultura en Twitter (@cultura_mx), Facebook (/SecretariaCulturaMX) e Instagram (@culturamx).